Me late que pensaste de inmediato en incendios, robos y desastres naturales, tres de los riesgos más comunes a los que nuestros hogares están expuestos. Así que acertaste. Sin embargo, debo decirte que existen otras coberturas típicas que también se convierten en un alivio y tranquilidad, para quienes ya contamos con un seguro de hogar.

A pesar de que el país ya ha superado una época de terribles apagones que en muchos casos causaban desgracias por la intensidad de la energía al volver, aún existen índices de preocupación por los registros de incendios causados por malas conexiones eléctricas.

La inseguridad también ha sido un tema de constante preocupación, sobre todo cuando se trata de robos y asaltos a viviendas. Estos casos incluso suceden en urbanizaciones con seguridad privada, de ahí que nunca dejaré de repetirte estos consejos de seguridad para prevenir robos.

Lo difícil, elegir la aseguradora

Si es la primera vez que vas a contratar un seguro de hogar y buscas por tu cuenta las empresas, te tomará mucho tiempo. Yo te sugiero que busques asesoramiento con algún familiar, amigo o compañero del trabajo para que te recomiende cuál es el mejor seguro de hogar a su criterio. O sino, dedícale unos minutos a este post que explica criterios para la selección del mejor seguro de hogar para ambientarte.

Y como el mercado te ofrece un montón de opciones, te recomiendo que elijas las que más te convenga tus intereses, la que asegure todo aquello que deseas proteger y sobre todo la que mejor se ajuste a tu economía. No temas en comparar, más bien aprovecha este artículo sobre comparador de seguros para que puedas decidirte pronto.

Las coberturas básicas

Las tienen todas las empresas de seguros, así que en todas las webs, en todos los folletos y en todos los anuncios verás casi siempre las mismas coberturas. Las más típicas son las que te expongo ahora:

1. Incendio
2. Responsabilidad civil
3. Robo y asalto
4. Accidentes personales domésticos
5. Equipo electrónico

Los tan temidos incendios

Y quien no se asustaría. Todo aquello que te costó años y años de trabajo puede convertirse en cenizas en cuestión de minutos. Pero eso no es todo, el riesgo del fuego es latente y apremiante sobre todo si un suceso como este nos sorprende en casa, con nuestros seres queridos adentro.  

En todo momento debes tener claro que la cobertura es solo por los bienes asegurados, así que es importantísimo saber con certeza cuáles son los bienes que quieres resguardar. Piensa con calma, observa a tu alrededor y valora aquello que más atesores. Debes consultar en qué casos se aplicaría esta cobertura. La mayoría de empresas lo hacen en estos casos:

• Incendio y/o rayo, y del calor y del humo producido por estos fenómenos.
• Explosión del gas o de aparatos de vapor que se utilicen estrictamente para uso doméstico.
• Algo que debes tener presente también son las exclusiones de la cobertura. Este es otro tema, pero si te animas a averiguarlo, puedes encontrar toda la información en este apartado de cómo indemnizar los daños por incendio.

Cuando hay daños por ‘default’

Ese término lo aprendí hace poco observando el fútbol. Y no me refiero a las faltas o patadas, sino a los resultados de un partido que terminan perjudicando o beneficiando a terceros, sin siquiera ser partícipes  del mismo.

Con todo esto solo quiero aclararte el panorama para que comprendas en qué consiste la cobertura por responsabilidad civil. Pues muchas veces hay acciones o siniestros en los que se termina afectando un tercero, que también reclamará por una posible reparación de sus bienes. Estos casos se presentan en su mayoría cuando una rotura de tubería termina afectado los bienes del vecino o cuando en un incendio, resulten afectadas sus propiedades.

Para esos casos, difíciles pero no imposibles, es que sirve que nuestra cobertura de responsabilidad civil.

Robos y asaltos

Si hablamos de las coberturas más típicas, robos y asaltos tranquilamente encabezarían un ranking de los principales motivos para contratar un seguro de hogar. Para conocer a la perfección en qué consiste esta cobertura, lo primero que hay que comprender es la diferencia entre robo, asalto y hurto.

Una vez claros con los conceptos, esto es lo que en el mundo de los seguros se contempla como robo:

•       El ingreso o penetración empleando la fuerza en locales e inmuebles cerrados.
•       La penetración en los locales designados en la póliza, usando violencia o amenaza que haga peligrar inmediatamente la vida de las personas que vivan en dichos locales o que trabajen en ellos por orden del asegurado.
•       La apertura con llaves correspondientes, de locales e inmuebles cerrados, siempre que el delincuente las haya obtenido por una de las acciones mencionadas en los incisos anteriores.
•       Penetración ilícita en los locales e inmuebles cerrados, mediante escalamiento o utilizando otras vías que no sean las ordinarias de entrada o acceso a los mismos.

Siempre expuestos a accidentes

Aplica si alguna persona que trabaje como empleado doméstico  sufriere cualquier lesión corporal accidental inclusive la muerte, producida por causas externas, violentas y visibles, sin intervención de su voluntad, mientras se halle desempeñando sus funciones o labores, o esté dentro del predio de la residencia del asegurado. Se considerará como accidente la asfixia por gases o agua.

Recuerda que al contratar personal para el servicio de tus necesidades domésticas, te conviertes automáticamente en responsable de su afiliación y deberás respetar sus derechos plenamente contemplados en la ley.

Por ello es importante forjar siempre las buenas relaciones con ellos.

Equipo electrónico

Se aseguran todos los equipos electrónicos indicados en la póliza, incluido el software de los sistemas operativos, siempre que estén listos para operar y que se utilicen conforme a lo prescrito y de forma profesional.

Los riesgos cubiertos para esta clase de equipos generalmente contemplan:

1. Incendio, explosiones de todo tipo, implosión, combustión espontánea, caída de aeronaves tripuladas o no, así como extinción, derrumbamiento, evacuación o remoción de escombros después de estos eventos.
2. Tormenta, viento, tempestad, granizo, alud, caída de rocas.
3. Agua de tubería, crecida de aguas, inundación, remanso, agua subterránea, agua pluvial, corrosión, vapor, helada, deshielo, agua por rotura o desbordamiento de tuberías y tanques.
4. Negligencia, manejo inadecuado, falta de habilidad, error de operación, actos malintencionados de  terceros.
5. Errores de diseño, material defectuoso, errores de fabricación, siempre y cuando no estén amparados bajo el contrato de garantía del fabricante, vendedor, montador o taller de reparación.
6. Sobretensión, inducción, caída directa de rayo, cortocircuito, sobre voltaje, falla de aislamiento, arco voltaico, fenómenos electromagnéticos y electroestáticos.

Recuerda que las coberturas más típicas de los seguros de hogar incluyen el continente (todos los elementos de la construcción y estructura de un edificio o vivienda)  y contenido (conjunto de bienes muebles, propiedad del asegurado, que se hallen ubicados dentro del local designado en la póliza) de la vivienda.

Mi intención con este post fue hacerte bastante sencillo el entendimiento de las coberturas más típicas de los seguros de hogar. Existen muchas otras coberturas que te invito a conocer, seguro serán de tu interés también.

Espero como siempre tus comentarios y sugerencias de nuevos temas.